lunes, 24 de noviembre de 2014

El extraño caso de la crema Cien Q10 del Lidl

Si eres una mujer o vives o sales con una, es posible que hayas oído hablar de una crema antiarrugas del Lidl que se vende literalmente por millones. De hecho con que solo vivas al lado de un Lidl podrás haberte encontrado con colas llenas de mujeres y maridos cabreados, que llegaban a rodear dos calles.
La razón es que en mayo la revista del consumidor española OCU publicaba un estudio sobre las mejores cremas antiarrugas y colocaba a esta en la primera posición del ranking. No importa que el estudio solo midiera el resultado de las cremas durante un mes. La crema q10 cien ya había pasado de ser una crema de baratillo de un supermercado de descuento a ser el último producto milagro.

En el gráfico superior puede verse la evolución de búsquedas de esta crema en Internet.
El primer pico aparece en junio (la publicación de OCU se da a finales de mayo), y en pocos días las existencias se agotan, por lo que el gráfico desciende. El segundo (y todavía parcial) pico llega el 6 de noviembre, ¡subiendo una orden de magnitud en unos pocos días!, cuando Lidl anuncia que vuelve a tener existencias, culminando en el hecho inusitado de que se vendan 1 millón de unidades en un sólo día.





Las ventas se agotan en junio y Lidl encarga al fabricante Dalli Group más existencias debido a una demanda incontrolable. El fabricante envía millones de unidades del producto a España que se ponen a la venta el 6 de noviembre, como se ve en el folleto de publicidad.


La caja de Pandora

Estos cambios súbitos de interés del consumidor son uno de los pocos en los que el vendedor no suele subir el precio del producto a pesar de conocer el aumento de la demanda. En todo caso, parte del atractivo de la crema era precisamente el precio.
Sea como fuere el poder de OCU vuelve a manifestarse, sobre todo en productos en los que es muy difícil calibrar la calidad. Pocos se molestan en leer las comparativas (las de cremas no son accesibles de forma gratuita por Internet), pero es una referencia en la que hay confianza ciega.

sábado, 22 de noviembre de 2014

Crecimiento de la población mundial por países (1960-2014)

A continuación expongo unas estadísticas que explican la evolución de la población mundial desde 1960 hasta 2014, desglosadas en una serie de países clave.


Población (millones)Proporción del totalCrecimiento de la proporción
 1960201219602012 
UE 28408,4505,213,457,17-87,57
Argentina20,641,10,680,58-16,30
Australia10,322,70,340,32-5,28
Brasil72,8198,72,402,8214,99
Canadá17,934,90,590,50-19,01
China667,11350,721,9719,17-14,60
India 449,61236,714,8117,5515,64
Indonesia88,7246,92,923,5016,64
Japón92,5127,63,051,81-68,21
Méjico38,7120,81,271,7125,66
Rusia119,9143,53,952,04-93,87
Arabia Saudí4,128,30,140,4066,38
Suráfrica17,451,20,570,7321,14
Corea del Sur25,1500,830,71-16,48
Turquía27,675,20,911,0714,84
Estados Unidos180,7313,95,954,45-33,57
África285,31138,29,3516,1541,84
Población mundial3036,87046,41001000

Información sacada de Eurostat y otras fuentes.



Algunas conclusiones

La población mundial (2014) consta de 7 mil millones de personas. Esto quiere decir que en poco más de 50 años los humanos nos hemos multiplicado por 2,3.

La natalidad en Europa lleva siendo calamitosa desde hace décadas, un ejemplo más de cómo el continente sigue perdiendo su peso en el mundo. Los países de la UE28 ya representan solo el 7% del mundo y Europa en total supone poco más de una décima parte.

La demografía rusa es un ejemplo extraño. Un país religioso y pobre cuya natalidad no ha sido últimamente alta, sino que ha tenido enormes altibajos (bajísima hace uno años, situada hoy día en 1,7 hijos por mujer). Como dato curioso, debido a la situación económica y el alcoholismo, los hombres mueren de media a los 63 años y las mujeres a los 75 (¡12 años de diferencia!) lo que lleva a que haya una distribución de 54-46 entre mujeres y hombres.

China, a pesar de ser el país más poblado del mundo, representa un porcentaje menor de la población mundial en 2014 que en 1960. Algo que la gente no suele saber es que su población ha envejecido rápido y su natalidad no es alta (1,4 niños por mujer), debido a las políticas que la limitan. La población de la India ha aumentado a un ratio mayor y todo parece indicar que en algún momento en el futuro superará en número a China. Gracias al aborto selectivo China es uno de los pocos países en los que hay más hombres que mujeres (otro de ellos es Afganistán, donde las familias llegan al límite de hacer pasar a niñas por niños durante años).

África es el continente de mayor crecimiento y no parece que vaya a parar. De hecho cuando llegue el momento en el que la mortalidad (sobre todo infantil) descienda, la población africana podría crecer incluso más. Una posible erradicación del SIDA, por ejemplo sería un acelerador.

Occidente, y sobre todo Europa, tiende claramente a la irrelevancia demográfica. Más de la mitad de la población ya viene actualmente de África, India y China. Estimaciones de Pew Research, predicen que en poco más de 3 décadas ese porcentaje combinado superará el 60% de la población mundial (2050). Para entonces seremos unos 10 millones.

sábado, 8 de noviembre de 2014

Cambiar de trabajo aumenta el desempleo juvenil pero mejora la vocación profesional

Es bien sabido que el desempleo entre los jóvenes tiende a ser mayor que entre los viejos. Algunas de las razones son que a veces en esas edades se está todavía estudiando o no se tiene experiencia. Sin embargo recientemente he leído un estudio sobre la movilidad laboral que indica otra razón: Los jóvenes cambian más de trabajo a esas edades porque no han encontrado su vocación profesional y eso les lleva a estar más tiempo desempleados.



En el gráfico de arriba se puede ver cómo varía la movilidad profesional según edades en tres grupos profesionales distintos. Entre los 20 y 30 años el ratio es todavía alto (la gente cambia bastante de profesiones). A partir de esas edades deja de serlo.

Donald Super fue importante en el estudio de la vocación. Argumentaba que esta no tiene un origen puntual sino que se forma durante años cuando uno aprende su concepto de sí mismo. Entre los 15 y los 24 todavía estamos aprendiendo quienes somos y en ello influyen las clases, los hobbies y el trabajo. Desarrollar poco tiempo a los hobbies a esa edad puede ralentizar descubrir tu vocación (imagino que por eso muchos programadores son jóvenes, ya que es una vocación a la que uno tiene acceso como hobbie desde una pronta edad). Por tanto es posible que no tengas claro lo que quieres ser cuando tengas 22 años y que eso te lleve de trabajo en trabajo.

Pero lo verdaderamente interesante es que este desempleo juvenil puede esconder algo positivo. Según un artículo en The Atlantic, la gente que cambia de trabajo durante su juventud tiende a terminar ganando mejores sueldos y a estar más satisfecha con sus trabajos, ya que terminan trabajando en lo que les gusta.

Así que si eres joven y odias tu trabajo aún es pronto para cambiar de ruta. Y probablemente saldrás ganando.

sábado, 1 de noviembre de 2014

Gregory Clark: una nueva definición de movilidad social

Una de mis lecturas más interesantes de este año ha sido "The Son Also Rises" de Gregory Clark, ya conocido por su "Adiós a las limosnas". En su nuevo libro Clark estudia desde un nuevo punto de vista el concepto de movilidad social (definición: la propensión al ascenso o descenso en su estatus social que tiene una persona de un país o raza).

Tradicionalmente esta se medía comparando los ingresos de una persona con los de sus antepasados. Este método daba como resultado un ratio entre 0 y 1 que hacía referencia a la correlación entre el estatus de un padre y su hijo. La correlación entre un hijo y un abuelo sería simplemente el cuadrado de ese ratio etc.

Ya en la universidad, los ratios que estudiábamos me parecían ridículamente bajos. La movilidad social en España por ejemplo es 0,3, lo que quiere decir que la correlación entre la riqueza de un nieto y su abuelo es menor al 0,09 (0,3 por 0,3). La mayoría del mundo académico siempre ha parecido aceptar esto. ¿Pero alguien cree que los nietos de Aznar, Botín o González tendrán sólo una correlación del 9% con la riqueza de sus abuelos y entonces el estatus familiar desaparecerá? ¿Cómo explicar entonces casos como el hijo de Gunilla Von Bismarck dando el pelotazo con Tuenti hace unos años, o la permanencia en la elite tecnológica y política del apellido De la Cierva en España? Esta idea de la movilidad económica parece enfrentarse a lo que vemos día a día. Simplemente está desfasada y Gregory Clark ha venido para enterrarla.

Movilidad a través de los apellidos


Clark ha se ha dedicado a investigar los apellidos de las élites de varios países y a compararlos con los de grupos menos destacados según su pertenencia a profesiones bien pagadas (abogados o físicos), su asistencia a universidades prestigiosas, los impuestos pagados por herencias etc. Esto le ha permitido poder seguir la pista a estos apellidos durante siglos. Los resultados son innovadores. La movilidad es mucho más alta de lo estimado tradicionalmente y muy parecida en todos los países y épocas de la historia.



Como se puede ver en el gráfico, la correlación es parecida en todos los países, incluyendo aquellos alta protección social como Suecia, otros que creen más en el laissez-faire como los EE. UU. e incluso otros en los que varias élites fueron asesinadas como China. La movilidad social es, por tanto, independiente de la desigualdad económica. La correlación nunca es 1, es decir las familias nobles/ricas tienden a perder su posición privilegiada con los siglos (lo que se llama "entropía social") y a volver a la media. En esto Clarke está de acuerdo con las ideas tradicionales, su innovación viene en que la vuelta a la media lleva siglos, no décadas, como se creía hasta ahora. Uno de los ejemplos que Clarke usa son los apellidos ingleses descendientes de los normandos, que todavía tienen hoy un estatus social superior a la media en Reino Unido (Tim Berners-Lee es un ejemplo).

¿Cómo se cambia el estatus social?


¿Cómo desaparece esta ventaja? No ocurre simplemente mediante malas inversiones. Si un pueblo o familia con ventaja (o uno desaventajado) se emparenta muchas veces matrimonialmente con otro de estatus distinto, esto puede llevar al cambio de clases. Pero en casos de endogamia (como los judíos askenazi durante siglos o los coptos en Egipto) el mismo estatus puede mantenerse durante siglos. Algo probablemente parecido a lo que ocurre en sentido inverso con los gitanos en España y otros países.

¿Por qué los estudios tradicionales se equivocaban?


Clarke argumenta que existe en las familias un estatus subyacente, que puede manifestarse o no en un momento dado, pero que se transmite de generación en generación hasta que, muy lentamente, desparece.
Lo explicaré con un ejemplo: Imagínate que el hijo de Bill Gates se dedica a la filantropía, generando cero ingresos. Eso llevaría a que el ratio de movilidad entre padre e hijo fuera engañosamente bajo. Sin embargo, generación tras generación, los descendientes de Gates seguirían teniendo un estatus subyacente, de forma que podrán mantener su ventaja durante generaciones.

¿Se trata de la genética?


Clarke parece creer que sí, pero le faltan pruebas, así que no lo asegura del todo. Lo que sí se asegura es que el estatus subyacente de las familias se transmite igual que la genética, como lo haría la estatura o el color de los ojos. Luego también influye la pertenencia a grupos importantes, la cultura etcétera.